Nada es para siempre.

Y llegó el momento, todo acabó, los abrazos empezaron a estar vacíos, empezamos a quedarnos sin aire, y sobre todo, sin amor, todo acaba, nada tiene excepción, poco a poco destruimos todo el amor que sentíamos el uno por el otro, todas las putadas que habíamos perdonado se convirtieron en rencor, y todos los recuerdos en olvido. Ahora ven conmigo, te enseñaré toda la verdad, el por qué de este final tan inesperado, la razón de todo lo que ha pasado entre nosotros, es muy sencillo, todo lo bueno se acaba, y las cosas buenas terminan para que otras mejores puedan empezar, y aunque ahora mismo todo esto nos parezca que es lo peor que nos ha podido pasar, que nunca olvidaremos nuestro pasado juntos, llegará un momento en el que aparezca la persona correcta para nosotros, la que nos haga entender que lo nuestro tenía que terminar.

El pasado ya ha quedado atrás, y nos ha dejado algunas cicatrices, que con el tiempo irán desapareciendo, porque nada dura para siempre, y cuando desaparezcan, nos reiremos de lo tontos que hemos sido al sufrir tanto por la persona incorrecta. Después de decir esto, pero antes de llegar al final, quiero dejarte claro que para mi todo este tiempo ha valido la pena, todo lo que ha pasado me ha servido para ser más fuerte, y si pudiese volver al pasado no lo cambiaría. Quizás no seas el amor de mi vida, pero has marcado una parte de ella. Te echaré de menos.