Aprender las mejores lecciones, en los peores momentos.

Y comprobé que la soledad no siempre es tan mala como pensaba, que el dicho de que mejor sola que mal acompañada es el que mejor define mi situación y que estar sola no tiene porque significar tristeza, significa libertad, no depender de nadie, hacer lo que quieras, como quieras, cuando quieras y con quien quieras sin tener que pensar en los demás. Es saber esperar a que venga la persona adecuada para nosotros sin pensar que no llegará nunca, es sentirse bien con uno mismo porque tu felicidad no depende de nadie más que de ti. Es salir ahi fuera sabiendo que te puedes comer el mundo, pero el mundo no puede comerte a ti.

Y que la gente diga lo que quiera, que vengan a por mi, que al menos soy feliz.